Junto a Inditex, Telefónica es la primera empresa española por su capital invertido y dividendos (beneficios), una Compañía de la que dependían decenas de miles de trabajadores españoles y que ahora “suena a latino”, porque dejó de ser una empresa de “todos los españoles” para pertenecer a unos cuantos políticos y burócratas (Bancos en gran parte), y éstos, ávidos de dinero, utilizan la praxis de las Multinacionales, capaces de buscar mano de obra barata hasta en el Polo Norte. Hace unos años se pudo leer una pequeña reseña histórica sobre esta entrañable Compañía. Ahora la publico de nuevo para vosotros, para que conozcáis las peripecias que la han llevado a ser una de las cuatro Compañías de Comunicaciones más importantes del mundo (aunque ya lo era cuando pertenecía al Estado Español).
“A finales del siglo XIX en las zonas urbanas más importantes de España, se establecen numerosas compañías, bastante rudimentarias, que abastecían de líneas telefónicas a un pequeño número de abonados. La compañía norteamericana IT&T (Internacional Telephone and Telegraph) será la principal proveedora de componentes y cableado para los tendidos, de manera que observando el buen desarrollo, prosperidad de dichas empresas y el interés creciente de los clientes por conseguir este avanzado medio tecnológico, decidió adquirir paulatinamente las pequeñas centralitas de estas pequeñas empresas (una jugada curiosa, muy española de vender el jamón para volverlo a comprar más barato y disponer de beneficios extras). En 1885 comenzaría a extenderse el tendido telefónico en España y las principales ciudades se encontraban conectadas entre si. IT&T Compraría la Compañía Peninsular de Teléfonos a principios de siglo XX y en 1924 se gestaría la monopolización del sector de la telefonía mediante la fundación de la Compañía Telefónica Nacional de España (CTNE), con una participación mayoritaria de activos de la empresa ITT. El capital inicial fue de 1 millón de pesetas, cifra exorbitada en la época. Su primera sede social se estableció en Madrid, en la Avda. Conde Peñalver Nº 5. Por aquel entonces, sólo en ese núcleo urbano estaban inscritos casi 13.000 abonados, siendo en número superior a los 80.000 los abonados en todo el territorio nacional.
El éxito de Telefónica ha sido imparable desde entonces. Tan sólo 5 años después, en 1929 se inauguraría el mítico rascacielos de Telefónica en pleno centro de Madrid. Un edificio de 15 plantas y una altura de casi 90 m., único en su clase en Europa y el más alto de España hasta 1953. En 1930 se instalaron los más modernos sistemas automatizados de comunicaciones, comparables a unos pocos en el Mundo. Los ingenieros y directivos de ITT copaban los cargos y funciones determinantes en la empresa. El Estado fue adquiriendo con los años más participaciones, hasta que en 1945 poseía ya el 79,6 % de las acciones. Es a partir de este momento cuando la dirección, que algunas veces fue desempeñada simbólicamente, pasa a manos de efectivos nacionales.
En 1960, la CTNE es la mayor empresa española y contaba con 100.000 accionistas y más de 32.000 empleados. En 1967 comienzan las telecomunicaciones por satélite y CTNE amplía su capital. En 1971 pone en marcha la primera Red Especial de Transmisión de Datos de Europa. En 1978 instala el teléfono Nº 10 millones. En 1987 cotiza en la bolsa de Nueva York y en 1989 forma parte constitutiva del proyecto HISPASAT.
En el año 1995, estando en el Gobierno el PSOE de Felipe González y Cía, se puso en venta Telefónica. Los viejos del lugar se echaron manos a la cabeza: “lo que nuestros abuelos habían conseguido con tanto esfuerzo durante un siglo, vienen estos chavales ahora y lo tiran por la ventana”. Realmente la ciudadanía estaba muy orgullosa de su mejor empresa y todos se sintieron decepcionados: los políticos, una vez más actuaron a espaldas del pueblo, sin consultarle, pues hablamos ni más ni menos que de la primera y más grande empresa española de todos los tiempos. Se acabó con esto un eficiente servicio al cliente, unas facturas asequibles y muchísimos puestos de trabajo. Nadie entiende el por qué de esta operación y todos opinan que ha sido “otro robo” a gran escala por parte de los políticos. Los hechos hablan: ¿quiénes han desempeñado desde entonces los puestos más altos en esa empresa privada llamada Telefónica S.A.? expolíticos o asesores de éstos.
Demos un salto en el tiempo y vemos que, a día de hoy, aparecen los nombres de César Alierta como actual Presidente, Iñaki urdangarín, Eduardo Zaplana, José Iván Rosa (marido de Soraya de Sáenz de Santa María) o Rodrigo Rato, todos imputados en casos escandalosos de corrupción y que han tenido o tienen que ver con la dirección de Telefónica S.A. Un dato curioso: sus mayores accionistas son entidades bancarias bien conocidas: BBVA, La Caixa y Santander, con más del 12 % entre todos. En lo que a mi respecta, no consigo “esa confianza” que merecería esta empresa multinacional, que continúa siendo la más importante de España y que se encuentra en el 4º lugar del mundo como empresa de Telecomunicaciones. Desde que tengo consciencia siempre he relacionado las típicas cabinas telefónicas de toda la vida, con el hurto más bajo. Era una práctica habitual, nunca han devuelto el cambio tras la llamada y eso, en miles de cabinas, supone un gran capital extra a costa de una mala praxis, gracias al monopolio y amparados por una Justicia que sólo aprieta al débil. Ya puestos, Telefónica S.A. tiene y ha tenido abiertos varios procesos que van desde los 900.000 euros en los tribunales españoles, 18 millones de euros de multa ante la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones, los más de 57 millones impuestos en 2004 o los 151,9 millones ante la Comisión Europea. Casi todos los procesos están vinculados a Movistar. Pero ¿qué son estas cantidades para una empresa que lleva casi 200 millones de teléfonos móviles vendidos y tiene 300 millones de clientes potenciales en todo el mundo, sin contar con el mercado chino, último aliado de esta empresa que va camino de convertirse en la más importante del mundo?
Abajo tenéis la valoración para esta empresa. Votat por favor. Una sola estrella si merece estar en la “lista negra”, que saldrá a la luz cuando supere un grado estadístico satisfactorio, junto a las demás “empresas con mala praxis”. De 2 estrellas hasta 5, tendremos también el detalle de efectuar una lista con las mejores o “de confianza”.
(Artículo publicado en agosto del 2013 por El Inútil Enmascarado en el desaparecido Blog Dilema).
Las cosas no han cambiado en estos últimos 4 años: mismo Presidente, mismos privilegios a las grandes empresas, abusos de todo tipo a los usuarios… Pero si ha cambiado una cosa. Si hace cuatro años se podía elegir entre un abanico de Operadores, Telefónica y Vodafone se han encargado de “succionarlos” como el que engulle una sopa sabrosa. También en esta ocasión los políticos, privatizando las empresas del Estado, nos engañaron, pues la “intención” estaba dirigida a una mayor competencia de calidad y precio, y resulta algo que no ocurre ni en la electricidad, combustibles fósiles (gasolina, gas), ni en nada, simplemente por que se mostró en principio un plan muy coherente de privatización que luego no se ha cumplido. En todo esto sólo ha salido beneficiado un puñado de particulares y de políticos, que son los que se llevan la mayor tajada, pues además controlan los Presupuestos Generales del Estado cada año. Pero la solución no pasa por tomar medidas radicales, ni derrocando gobiernos, la solución pasa con respetar el principio fundamental de Igualdad de Derechos, que todo el mundo tenga la misma oportunidad de fundar un negocio en igualdad de condiciones y que se retiren de una vez por todas todos los privilegios que amparan a una minoría, y eso lo deben hacer los políticos, y cuando digo políticos son todos, pues aquí no hay “buenos y malos” o más o menos honrados.
Actual Presidente de Telefónica S. A.