Seguimos con el repaso a las catedrales españolas en Perú con otro Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y uno de los símbolos más entrañables de este país sudamericano, pues se trata de la Basílica de Santa Rosa de Lima (212), un santuario que se levantó en el año 1728 en honor a esta santa Patrona del Perú (también de toda América y Filipinas desde 1671), justo al lado de donde nació en 1586. Construida al estilo Barroco y Rococó, durante el siglo XX fue demolida en gran parte, aunque conserva elementos importantes de su estructura e interior, como el retablo mayor, el presbítero, el falso crucero y parte de la nave central.
La Catedral de Abancay (213) se construyó modestamente a mediados del siglo XVII, con una sola torre al estilo de las iglesias conventuales coloniales. En el segundo tercio del siglo XX fue remodelada tomando su aspecto actual. Está dedicada a la Virgen del Rosario.
La Catedral de Ayaviri (214) está dedicada a San Francisco de Asís y se construyó, como la anterior, a mediados del siglo XVII. Está declarada como Monumento Nacional y se está restaurando desde el año 2017 profundamente, respetando su aspecto original, máximo exponente del Barroco Andino y sudamericano en general.
La Catedral de Cajamarca (215) también está declarada como Patrimonio Nacional Histórico. Se construyó durante el siglo XVII al estilo Barroco. Sus dos torres inclonclusas le otorgan una imagen cúbica al edificio muy particular, sobresaliendo un frontispicio. Está dedicada a Santa Catalina.
La Catedral de Huancavelica (216) se construyó durante el siglo XVI y por el año 1608 ya se oficiaba misa con normalidad, aunque se siguió embelleciendo durante dicha centuria. Predomina el estilo Barroco Churrigueresco. Está dedicada a San Antonio y conserva casi la totalidad del original, con elementos incorporados en el siglo XVIII y épocas más recientes.
La Catedral de Huancayo (217) se construyó al final del periodo español en el Perú, entre 1799 y 1831. Muestra los estilos Barroco y Neoclásico. Declarada como Monumento Histórico, fue reconstruida entre 1918 y 1922, así como en 1947 tras sufrir derrumbes en varios terremotos a lo largo de su historia. Está dedicada a la Santísima Trinidad.
La Catedral de Ica (218) está dedicada a San Jerónimo y se construyó a mediados del siglo XVIII como gran templo conventual de la orden de los Jesuitas. Los documentos hablan de una profunda remodelación que terminó en 1814. No hay que olvidar que los terremotos obligaron a numerosas intervenciones desde que se construyera. Siempre se siguió el estilo original Neoclásico con elementos del Barroco, sobre todo en su interior. De hecho, el terremoto del 2007 la dañó y está en proceso de ser restaurada.
Patrimonio Histórico y Cultural de la Nación es la Catedral de San Pedro de Juli (219), comenzada al estilo Barroco en la década de 1560s por los dominicos y terminada en 1576 por los jesuitas. Se conserva casi intacta desde su construcción, así que se trata de uno de los tesoros arquitectónicos más importantes de América.
La Catedral de Lurin (220) también está dedicada a San Pedro y se construyó en las primera décadas del siglo XVIII al estilo Barroco y Neoclásico. Se encuentra completamente renovada y está declarada como Monumento Histórico Nacional.
La Catedral de Piura (221) es otra construcción histórica que no deja a nadie indiferente. Se construyó al estilo Neorenacentista en 1588 y está declarada como Monumento Nacional Colonial. Destacan sus dos altas torres de gran belleza estética. Ha sido intervenida y ampliada en numerosas ocasiones a lo largo de la historia, remozada en estos últimos años, pero siempre respetando el original, luce un estado impecable. Está dedicada a San Miguel Arcángel.
Otro Monumento Histórico es la Catedral Antigua de Sicuani (222), construida en el año 1689 con una bella combinación de estilos, como el Manierista de una sola torre y elementos barrocos tanto en el exterior, pero sobre todo en su interior. Está dedicada a Nuestra Señora del Monte Carmelo.
Por último, hay que recordar que Perú es un país “sísmico” y prácticamente han desaparecido las construcciones efectuadas con materiales poco resistentes, incluso muchos de piedra caliza y de mayor fortaleza sufrieron graves derrumbes a lo largo de la historia. Por eso se han conservado algunos restos considerados de valor histórico, como en Moquegua, cuya Iglesia Matriz (223) dedicada a Santa Catalina de Alejandría, construida por la década de 1560s, se derrumbó en sucesivos seísmos y se reconstruyó hasta el terremoto de 1868, cuando no se reconstruyó más, sino que se decidió construir la actual Co catedral de Santo Domingo, parte de la cual con los restos de la anterior. El Museo de la Ciudad (Contisuyo) recuperó la fachada de la Matriz y varios elementos arquitectónicos y estéticos de su alrededor, conjunto ahora visitable y de gran valor histórico y cultural.