De nada sirvieron los juicios mediáticos contra las tabaqueras en Estados Unidos de América, ni las sanciones multimillonarias impuestas a las diez más grandes, ni que los científicos consideren “mortal” el hábito de fumar, pues uno de los medios más importantes del mundo, como es el Cine (y las series de televisión) de Hollywood, promocionan de nuevo el Tabaco.
En la serie «El Pingüino», estrenada en Octubre del 2024, «Lady Falcone» fuma sin parar capítulo tras capítulo. Incluso «empalma» cigarrillos y llama la atención del espectador con el encendedor de turno, para que la escena fumadora sea doblemente sugerente. Hasta en el cartel de la serie aparece un cigarro humeante. Sería una excepción, dirán muchos, pero no, pues todas las películas y series de los últimos años exhiben el incitador mensaje de sus protagonistas fumadores.
Hace un año que dejé este vicio, pero puedo asegurar que casi siempre, al ver las escenas fumando, me incitaba a fumar yo también. Se fuma hasta en «El señor de los anillos», por el gran mago con su pipa y otros personajes fantásticos. Desde que no fumo ya no me incita, pero a millones de personas fumadoras no les hace ningún favor este tipo de escenitas, que se pueden suprimir perfectamente, sin alterar la interpretación.
En fin, ¿No resulta una contradicción que soportemos los episodios «woke», inclusivos de todo tipo, los mensajes «concienciadores» pro-naturaleza, cambio climático, etc, pero al mismo tiempo nos bombardean también con las bebidas alcohólicas, el tabaquismo y las mentiras históricas?
La farsa continúa en Occidente. Se nos obliga a seguir los protocolos dictados en los despachos de funcionarios y políticos, seguimos las pautas “decentes” que nos dicta la sociedad, pero una y otra vez las grandes corporaciones, de todos los sectores industriales, adulteran los mensajes y la realidad con todas sus herramientas posibles, asociándose incluso entre los distintos sectores para sobrevivir. En este caso, los estudios de Cine y las tabaqueras «renovaron» su contrato “no escrito”, roto hace unos años aparentemente. Claro, rodar una película de alto presupuesto es una inversión muy alta, y los millones de las tabaqueras vienen estupendamente.
Se ha prohibido fumar hasta en los espacios abiertos, pero se permite fumar en las películas y series, incitando al espectador y vulnerando las normativas al respecto de todos los países de lemas «contra el tabaco». ¿Cómo es que no se actúa desde las fiscalías al respecto? ¿Por qué nadie lo denuncia? ¿Por qué no caen los responsables que lo permiten? ¿También están sobornados por las tabaqueras? En cuanto al Cine en España, veo muy poco, pero las pocas que he visto también se ha fumado en todas ellas: «Alcarrás», «As Bestas», etc., así que debe ser una consigna global que se permita el tabaco, con la hipocresía de prohibirlo en terrazas y lugares que no afecta a nadie, ni «pasivos» ni «activos». Tenemos que cambiar a los políticos por una verdadera representación del Pueblo, que se preocupe realmente por las necesidades de los contribuyentes.