A mediados de los años 80s, cerca de la mítica Discoteca América de Benidorm, en calle peatonal y en un local que debías bajar primero una larga escalera, me sorprendió una Fiesta Bávara con todos los participantes vistiendo este traje típico alemán, brindando con grandes jarras de cerveza y cantando temas folclóricos bávaros. A los lados del local estaban instalados equipamientos para practicar actividades lúdicas diversas, como una diana para dardos, máquinas recreativas y un mini-parque infantil. Por primera vez participé en una Oktoberfest, fiesta originada en la ciudad de Munich y que se ha convertido en todo un evento de carácter internacional. Pasado un tiempo pude comprobar que las fiestas alemanas que se celebraban en Benidorm, se trasladaron a la vecina ciudad de Calpe, convirtiéndose actualmente en la Oktoberfest más importante de España, al menos en cuanto a participación bávara y alemana en general se refiere.
La Oktoberfest se viene celebrando en Munich desde el año 1810, aunque algunas ediciones (por las guerras) no se han celebrado, son más de 200 años de cultura “cervecera” que se hizo primero popular en toda Alemania y países vecinos, y que con el tiempo fue arraigando en países de América y en las últimas décadas en el resto de Europa. Suele tener una duración de dos semanas, así que este año empezó el 16 de septiembre y termina el 3 de octubre. El primer día en Munich arrancó el Festival a las 11:00 de la mañana con la apertura de las instalaciones, recibiendo a los clientes con un desfile de trajes tradicionales. A las 12:00 el Alcalde de la Ciudad golpeó el primer barril de cerveza, siguiendo la tradición, para la degustación de esta multitudinaria bebida. Al día siguiente el desfile de trajes típicos se celebró por las calles céntricas de la Ciudad.
El martes día 19 de septiembre se celebra El Día de la Familia, primero de los varios que se celebran, donde existe una bajada de precios en los comercios y espectáculos. El jueves 21 se celebró una Misa tradicional religiosa. El domingo 24 a las 11:00 un Concierto de Bandas de Música a los pies de la Baviera. El martes 26 hasta las 19:00 otro día especial para la familia y el 3 de octubre se clausurará el Oktoberfest con el saludo en las escaleras del monumento de Baviera a las 12:00 del mediodía. Por supuesto, esto que os he contado son sólo los actos oficiales y protocolarios, pero cada día se celebran eventos de todo tipo por toda la Ciudad y, sobre todo, en el recinto principal, donde se escuchó el tradicional ¡O´zapft es! (¡que aproveche!) por el alcalde Dieter Reiter.
Esta “Feria de la Cerveza de Octubre” sirve a muchos países “cerveceros” para ampliar sus “pretextos”, aunque en algunos, como en la República Checa, no necesitan emular a sus vecinos, ya que son y con creces, los mayores consumidores de esta bebida, con 143 litros al año por habitante, que resulta el récord del mundo y además desde hace mucho tiempo lo vienen siendo. Quizás no consuman más barriles que China (por diferencia en habitantes), pero en ningún otro país se consume más cerveza por habitante. En la región de Bohemia existe una localidad que se llama Pilsen, ¿les suena de algo?
En Alemania tampoco se quedan cortos ya que consumen 110 litros por habitante al año. Pero algo tienen de récord, que es la propia Oktoberfest, la Feria con más visitantes: alrededor de 6,5 millones todos los años. Austria sigue en la lista a más consumidores de lúpulo con 108 litros por habitante, así que es en Centroeuropa donde más pasión le ponen a esta bebida espirituosa.
Para encontrar los países que les siguen en consumo de cerveza, debemos viajar más al Norte, a Estonia, con 104 litros por persona, Polonia con 100 litros y su famoso festival particular: el Wroclaw. Para los siguientes “mayores consumidores”, ya con cifras inferiores a los 100 litros por persona, se sitúa Irlanda (93), Rumanía (90), Croacia (82) y Bélgica (81). Son datos del año 2014, y en España se superó los 82 litros por habitante en 2015, así que actualmente se situaría en el lugar 13º tras Belice (11) y Gabón (12).
Fuera del ámbito Centroeuropeo, Irlanda y España son los países más consumidores de cerveza del mundo, como hemos podido comprobar en la anterior relación. También se puede decir que, en relación a habitantes, por consumo y producción, España es una potencia mundial, por eso la Oktoberfest ha encontrado en nuestro país una gran afición, celebrándose en distintas localidades. Primeramente ya he comentado el Festival de Calpe, donde no se conforman con celebrarlo en estas fechas, sino que lo celebran en numerosas ocasiones al año, sobre todo en verano.
En Tenerife se celebra la más veterana Oktoberfest de España, ya que se remonta a los años 70s del siglo pasado, con un Festival en el puerto de Santa Cruz que se celebra desde 1975. En Calella, Barcelona, se celebra desde 1987, con casi 60 bandas de música de 11 países participando. En Zaragoza la hacen coincidir con la Pilarica de principios de Octubre desde 1994 y también intervienen muchas bandas de música bávaras y la gastronomía típica de esta región alemana. En Málaga se celebró por primera vez en 2010, repartiéndose más de 30.000 litros de cerveza alemana. En Valladolid desde el 2014 y en Madrid, en distintas localidades desde el 2012, siendo en la Capital donde ha comenzado más recientemente, celebrándose desde 2014 en el antiguo Palacio de los Deportes. También en distintas localidades de la Comunidad Valenciana se celebran dos al año, siendo en la Capital del Turia en abril y septiembre, y en otras localidades turísticas (como la misma Calpe del 25 de octubre al 5 de noviembre la Fiesta principal, Benidorm, Alicante, etc), en estas fechas más las típicas del verano. En Alicante estuvo instalada una “Oktoberfest permanente” durante 3 años al menos, pero se trasladó o se desinstaló hace dos años.
La Oktoberfest no deja de ser un evento dirigido a la venta en general y de promoción a la cerveza alemana, como cualquier otra Feria dirigida al consumo, pero ha sabido transmitir una identidad propia: la región de Baviera, con su cultura, su folclore, y unas ganas de disfrutar de los momentos en buena compañía. En América se celebra también al menos en ocho países, algunos con buen número de inmigrantes alemanes, como Argentina y Brasil, pero también en Chile, México, Guatemala, Venezuela, Perú, El Salvador, etc.