En los Estados Unidos se pueden encontrar numerosas comparativas: Camaro Vs Mustang, ya que son dos modelos míticos y muy vendidos en el país, pero en Europa su venta es menor y prácticamente los Camaro ni se ven por las carreteras. No así el Mustang, un modelo muy apreciado, sobre todo en España, quizás porque existe una fábrica FORD en Almusafes (Valencia). Pero traslado aquí la comparativa porque la historia de esta rivalidad, entre modelos y marcas, resulta de lo más curiosa.
El modelo “primario” de esta saga de “caballos cimarrones rampantes” (“pony cars” en los EEUU) fue el Ford Mustang, que se presentó en el año 1964, en una época “acertada” para la venta de vehículos deportivos en los Estados Unidos, mezcla de coche rápido pero robusto. El diseño se debió a la iniciativa de Lee lacoccca, pero hubo una gran polémica entre marcas que se convirtió en película, estrenada hace pocos años.
El Camaro fue la respuesta de Chevrolet (General Motors) al Mustang. Salió en 1967, tres años después, e inmediatamente se le tachó de plagio. Su diseño estaba claramente basado en el modelo de FORD. Pero el Camaro presentaba un motor V8 de 5.7 litros, desarrollando 330 CV de potencia (incluso se ofrecía a los más fanáticos una versión más potente todavía, de 380 CV). ¿Cuál fue la respuesta ante las acusaciones de plagio? Pues las respuestas técnicas… Que obviamente no son ciertas pues comparten detalles tan minúsculos que claramente es una copia casi exacta. Pero en mi opinión, el diseño Corvette, muy anterior, seguro que influenció a la hora de dibujar el Mustang. Así que estamos en lo mismo de siempre: ¿Quién copia realmente? ¿Qué son los Derechos de Autor?
El Ford Mustang primero inició una saga de modelos en 7 generaciones con mayor o menor éxito y no el mismo según a qué lado del charco miremos. Este primero se presentó como un diseño revolucionario basado en un prototipo espectacular. Se vendieron un millón de unidades en sólo dos años. Se presentaron motorizaciones V6 de 102 hasta 380 CV de potencia. Después se pasó a un V8. En cuanto al diseño, los “puristas” de la marca opinan que el “auténtico” Mustang es el Ford Shelby GT500, modelo que usa la misma carrocería que el Mustang pero resultó lo más avanzado que la marca podía alcanzar en lujo y prestaciones desde 1965 a 1970.
Los diseñadores del Mustang, dirigidos por lacoccca, fueron Philip T. Clark, Charles H. Phaneuf, Don Kopka, Joe Oros, David Ash y Gayle L. Halderman. Completaron un modelo exitoso, leyendo lo que el público quería: un coche deportivo de altas prestaciones pero más asequible al bolsillo medio americano, y se consiguió. La fórmula se copió hasta en Europa y Asia, aunque no siempre de manera exitosa. Os pongo algunos modelos que copiaron en EEUU: Pontiac Firebird, AMC Javelin, Dodge Charger, Plymouth Barracuda renovado de Chrysler y la segunda generación del Dodge Challenger. El Mustang también es un claro inspirador de los diseños de cupés como el Toyota Celica japonés y el Ford Capri, fabricado en y para Europa que, tras su éxito, sería importado a su vez a los EEUU. Luego se copiaron diseños en BMW, FIAT y SEAT, etc.
Si ahondamos más en el tema polémico de Quién copia a quién, solamente tenéis que comparar incluso los modelos actuales, séptima generación en el Mustang y sexta en el Camaro.
Los veo prácticamente idénticos, hasta sus motores, y vi un Camaro la semana pasada y lo confundí con un Mustang porque son iguales. ¿Cómo es posible que sean tan idénticos tras casi seis décadas construyendo modelos, en teoría, por separado? Si no hay espionaje industrial en este caso, pues no lo entiendo. Eso sí, ambos me merecen todo el respeto y admiración, son de mis modelos preferidos, una pasada, solamente superados de los americanos por el Corvette, para mi gusto.
