Hace tan sólo una década, conectarse a los chats, foros, comunicarse especialmente por Messenger y jugar a los juegos on-line obsesivamente, era un terreno “exclusivo” de los frikis, esos tip@s raros que no veían la luz del Sol y que siempre se encontraban enganchados a un teclado de ordenador, embebidos en su mundo virtual y que se clasificaban incluso como “antisociales”. Pero lo que son las cosas, hoy en día un “friki” resulta más bien lo contrario, una década después, el tip@ raro es el que se mantiene al margen del WhatsApp, Facebook, no juega a ningún juego on-line, ni está a la onda sobre las nuevas tecnologías ni aplicaciones de las telefonías móviles.
Consultando los datos oficiales del Banco Mundial, existen a principios del 2016 un 41% de la población española que ha contratado o posee una línea fija de teléfono, sea en vivienda u oficina. La misma fuente nos cuenta que existen en España un 108% de líneas para telefonía móvil contratadas, es decir, que cada habitante de España tiene al menos un teléfono móvil operativo. Alrededor de 50 millones de teléfonos móviles y creciendo, pues todavía no se ha contabilizado el crecimiento de este mismo año que ha sido considerable. Aunque parece una cifra exagerada, no somos de los países con más líneas contratadas, aunque estamos a la altura de los Estados Unidos (118%), quizás debido a que los precios son de los más elevados del mundo. No me puedo imaginar si las tarifas se redujeran a la mitad, pues entonces superaríamos con creces a Alemania (117%), Argentina (144%), Austria (157%), o Italia (151%) por ejemplo.
Probablemente el que se mantenga un 41 % de líneas fijas de teléfono es debido a que las Compañías, en su usual política abusiva, obligan a mantenerla para contratar el ADSL o Fibra Óptica y poder tener acceso a Internet. El porcentaje no es más elevado porque una cantidad considerable de usuarios ha optado definitivamente a conectarse a la Red con su dispositivo móvil, aparcando los PC. Se calcula que en España hay unos 22 millones de usuarios que navegan habitualmente por Internet. El 40 % de la población española dedica una media de 5,9 horas a la semana para jugar on-line, según datos de la ISFE. El 79 % de éstos lo constituyen niños de entre 11 y 14 años de edad.
Los datos no engañan, ni tampoco lo que podemos observar en los transportes públicos habitualmente y en cualquier situación viandante: casi todos practican un nuevo “rezo” iluminados por la intensa luz de sus teléfonos móviles. Esta práctica hace una década se consideraba “antisocial” e incluso de mal gusto, pero los tiempos cambian y hemos pasado de criticar “en directo” a despotricar por las redes sociales o a felicitar a un familiar o amigo por el Facebook. En fin, nos hemos convertido en frikis y ni nos hemos dado cuenta, hasta la próxima moda que Dios sabe de qué tratará.
César Metonio.