En Junio de 1924 surgieron las primeras ordenanzas “modernas” que regulaban las ondas radiofónicas de España, tras más de dos décadas de continuos experimentos, como pioneros en el mundo (1902). El 10 de Noviembre se cumplió el Centenario de la Radio en España, no por su primera emisión, pues ya se emitía de manera experimental, sino que Radio España (desde Madrid) obtuvo la primera licencia y emitió por primera vez en dicha fecha, ya con una programación diaria. Cuatro días después, obtuvo su licencia de emisión Radio Barcelona.
Comenzaba así un nuevo “orden” para la comunicación. Pero resulta emocionante conocer dichos comienzos, casi en paralelo al Cinematógrafo, el primero transmitía la voz humana y el sonido en general, y el segundo las imágenes, resultando al fin dos «artes» que movieron y mueven masas desde hace más de un siglo.
La Radiocomunicación se trata de una tecnología que, mediante un dispositivo emisor sintonizado adecuadamente con un receptor de ondas (de corto, medio o largo alcance), puede trasladar sonidos y voz humana a distancia en distintas frecuencias. Las más utilizadas para el público radioyente fueron y son la FM (Frecuencia Modulada superior a los 20 KHz), adaptada desde 1937 y la AM (inferior a 10 KHz).
Se tiene al italiano Marconi (1874-1937) como el inventor de este sistema de comunicaciones, pero realmente fue su colega, el valenciano de Segorbe, Julio Cervera (1854-1927), que trabajó tres meses con él en 1898 quien, en 1902, desarrolló y consiguió la primera comunicación entre las localidades españolas de Javea (Alicante) e Ibiza.
Marconi trabajaba con una meta distinta, ya que buscaba la Telegrafía sin hilos, meta que consiguió y por el que le concedieron el Premio Nobel, pero a los verdaderos inventores, Tesla en 1897 (al que un tribunal americano le concedió el mérito del invento, quedando Marconi como plagiador más de tres décadas después) y Cervera en 1902, que construyó los primeros aparatos, trasmitiendo por primera vez con éxito a grandes distancias, no se les mencionó siquiera hasta muchas décadas después.
Tras el éxito de Cervera con su prueba, cuando sorteó nada menos que 85 kms y con el mar de por medio (Ibiza es una isla), registró la patente en Inglaterra, Alemania, Bélgica y España. Tan sólo dos años después, el Gobierno Español se “apropia” del invento, poniendo condiciones y precio a las ondas. Solamente pueden emitir desde 1904 los que exhiban las respectivas licencias de emisión. Desde 1906 se comenzaron los experimentos ya más enfocados para el negocio, así que no es de extrañar que las primeras emisiones más prolongadas se debieran a Radio Ibérica, fabricante de componentes de aparatos emisores y receptores de Madrid, siendo ellos mismos quienes emitían ya una especie de programación y no meras conversaciones, hasta mediados de 1923 que estructuraron seriamente las sesiones radiofónicas hasta obtener su licencia, que conseguirían un año después.
Pero no sería en España donde se desarrollaron las primeras programaciones radiofónicas, dirigidas al gran público, ya que esto ocurrió en Argentina desde 1920, siendo los primeros en el mundo. Cinco años después ya emitían hasta una docena de emisoras en este país. Tras la de Argentina emitieron en Estados Unidos pocos meses después, y en 1921 en México. Luego se fueron añadiendo emisoras a medida que se regulaba el sector en cada país y se conseguía la tecnología. Las lecciones de Cervera en cuanto a los datos técnicos del invento y otras explicaciones, editadas en disco, facilitó su difusión al resto del mundo desde 1906.
A partir de 1920, tener en una vivienda modesta un aparato receptor, en esas fechas de inicio de la Radio, fue todo un acontecimiento social. Las familias y los invitados, se reunían en torno al “complicado” aparato que parecía entonces como “de otro mundo”, para escuchar a personas que se encontraban a cientos de kms y, lo que era más sorprendente, escuchar grupos y cantantes famosos, y seguir las primeras “radionovelas”, todo un acontecimiento casi mágico.
La Radio también revolucionó las comunicaciones para las aplicaciones de nuevas tecnologías, por ejemplo para la navegación, aviación, el transporte en general, la medicina, etc, sobre todo aplicarla para la guerra, que siempre ha estado a la última en esto de los inventos que faciliten matar al prójimo. También los españoles fueron los primeros en instalar emisoras experimentales portátiles para la Guerra del Rif, por ejemplo, durante la primera década del XX. Pero no serían importantes los avances hasta 1937 con la FM, que corregía (modulaba) la voz. Sería durante la II Guerra Mundial cuando fue más determinante su utilidad. Si Colón «acercó» a los seres humanos del planeta, la radio «reduciría» las distancias, revolucionando el mundo de las Telecomunicaciones.